“Efecto domino”, con esta frase podríamos resumir lo que en principio uno podría creer que la crisis Inmobiliaria en China no tendría ninguna repercusión mundial, pero vivimos en un mundo global donde un acontecimiento en una parte del mundo puede desencadenar efectos en otras partes del mundo en muchos aspectos completamente distintos al acontecimiento inicial. Paso a explicar los hechos, en los últimos tiempos vimos como empresas como Evergrande el gigante chino inmobiliario entraba en quiebra y generaba todo un efecto en cascada, con la quiebra de un sinnúmero de empresas del sector y otras empresas proveedoras del mercado inmobiliario. Esto obviamente dejo sin empleo a una gran cantidad de personas en toda China, y desacelero la economía interna del gigante asiático.
PAPA GOBIERNO SALE AL RESCATE
A diferencia de los países occidentales capitalistas, China se caracteriza por tener una economía donde la intervención del estado Chino esta siempre omnipresente planificando e interviniendo las veces que sea necesario, y esta no fue la excepción. Con el objeto de absorber de alguna manera la gente que quedo sin empleo, el gobierno central de china ordeno a los bancos chinos con capital mayoritariamente estatal a canalizar los créditos que otrora se asignaban a las empresas constructoras, a redireccionarlas para la industria, lo cual sumado a políticas monetarias de una devaluación planificada desde el estado para provocar que los productos industrializados Chinos compitan en el mercado internacional con precios más bajos aun. Debido a este acontecimiento los mercados mundiales se comenzaron a abarrotar de los productos que las fabricas producen a toda máquina, aumentando el volumen de producción convirtiéndose definitivamente en el motor de la economía China.
DIOS MÍO Y ¿AHORA QUIÉN PODRÁ AYUDARNOS?
Un día, los consumidores, empresas y gobiernos occidentales nos despertamos con las estanterías abarrotadas de productos chinos que gracias a aumentar exponencialmente su producción y consecuentemente su drástica reducción de precios están generando la alegría de los consumidores finales pero dibujando caras de gran preocupación en los empresarios occidentales que ven reducir en poco tiempo sus ventas, sumado a que la industria China poco a poco esta evolucionando y actualmente encontramos productos que no solamente son burdas copias de mala calidad de productos de occidente, sino que en algunos casos poco a poco los productos chinos están construyendo autos con un diseño atractivo, métodos constructivos de mejor calidad y en algunas áreas como los autos eléctricos, generando productos sumamente competitivos y de tecnología de avanzada, muchas veces superior a la de sus pares occidentales. Esta combinación de buenos productos, diseños atractivos y precios bajos que hacen dudar a mas de un potencial comprador para la compra de su nuevo vehículo. Como indicamos anteriormente comienza el efecto domino, ante la caída de las ventas de vehículos occidentales especialmente crítico en los vehículos eléctricos, está provocando que también los políticos occidentales comiencen a preocuparse por las consecuencias que esto provoca, como ser la perdida de empleos tanto en las fabricas de Europa como de los Estados Unidos y la obvia reducción de impuestos que cobrar los gobiernos de estos países.
AUMENTO DE ARANCELES A LOS VEHÍCULOS CHINOS, ¿EN SERIO ES LA ÚNICA SOLUCIÓN?
Como siempre la solución mágica que se encuentra en el manual de todo político es la de aumentar los impuestos a los productos Chinos con el objeto de desalentar la compra de productos Chinos. Pero la pregunta es la siguiente ¿Es suficiente?, ¿es una solución a corto plazo?, y posiblemente mas importante aun ¿podemos hacer algo más? La historia reciente nos enseña que no deberían subestimar el peligro que representa a mediano y largo plazo lo que esta haciendo China con el apoyo a su industria, con apoyo de créditos para mejorar sus productos, aumentar su capacidad productiva y exportadora.
¿Y EN CASA COMO ANDAMOS?
Empresas como el grupo alemán VW que apostaron en su momento muy fuerte por la transición a los vehículos eléctricos, se están enfrentando a que el agresivo plan de incorporación de nuevos modelos de vehículos eléctricos se esta enfrentando a un mercado que no termina de arrancar para el vehículo eléctrico, y si a esto le agregamos que los fabricantes chinos poseen un desarrollo vertical de su industria, desde ser lo mayores fabricantes de baterías del mundo, costos de fabricación cada día mas bajos, y medios de transporte del producto terminados su flota de barcos porta contenedores mas grande del mundo. Hacen que la batalla se convierta cuesta arriba. Sim embargo por lo menos el grupo VW esta planificando hacer una mega fábrica de baterías para tratar de no quedarse atrás frente a sus pares chinos. Pero posiblemente esto no va a ser suficiente y los gobiernos tomando el ejemplo de Japón posterior a la segunda guerra mundial deberán aportar su granito de arena, apoyando y fomentando a las empresas privadas para que a su riesgo realicen importantes inversiones en investigación y desarrollo a condición de condenarles un importante % de impuestos, esto unido a un conjunto de medidas que los gobiernos conjuntamente con las empresas privadas deberán planificar, y poner en practica si desean que la industria del automóvil sobreviva en el futuro.